Cuál es la instalación, creo que todos ustedes saben. Lo obvio. Pero ya la variante en la que se ha enmarcado la famosa Estatua de la Libertad es completamente inobvia. El gráfico es de un estilo muy moderno, que, sin embargo, no interfiere en absoluto en la percepción de este famoso monumento. La Estatua tiene un estilo atemporal y, aunque hayan pasado décadas, sigue siendo un símbolo de la libertad, pero también del crecimiento y el impulso de los Estados Unidos. La decoración encaja perfectamente en cualquier interior moderno, en un salón, un dormitorio, la habitación de un adolescente o de un estudiante. Aunque la dama en cuestión tiene casi 140 años, está claro que se mantiene al día en todas sus versiones. ¿Quizá le sirva de inspiración?