En este caso, puede tener la impresión de que la decoración se hizo después del anochecer. Ella es muy tranquila y sumisa. En primer plano, aparecen dos elefantes que parecen caminar hacia nosotros. Los árboles y el sol poniente los convierten en un fondo. Esta decoración es perfecta para un entorno natural entre muebles de colores vivos y formas originales. Al limitar la paleta de colores a unos pocos colores, obtenemos el efecto de una vista de cuento de hadas, ligeramente nostálgica. Lo asociamos con las películas animadas que veíamos cuando éramos niños, clásicos que podrían hacerte llorar. La vista de los elefantes caminando en la sabana con el telón de fondo del sol poniente hace que los recuerdos cobren vida. Un mural de pared es un registro atemporal de sentimientos relacionados con una infancia feliz y despreocupada.